Estimado señor,
Sé de buena tinta que la mayoría de las
veces, usted no sabe de su condición. Usted cree que es una persona normal,
alguien sociable con quien la gente se ríe. Bueno, lamento ser yo el que se lo
diga, pero me veo obligado a hacerlo, alguien debe decir la verdad. Es usted un
auténtico gilipollas.