Introduje mi dedo
índice en el ano del perro y comprobé dos cosas, que en efecto estaba muerto y
que su temperatura indicaba que estaba muerto. Le olí el hocico y olía a
limpio, a retrete recién fregado. Saqué mi libreta e intenté anotar mis
averiguaciones pero no pude, algo me lo impedía, por fin saqué el dedo del ano
del animal y pudo apuntar.
lunes, 17 de noviembre de 2014
jueves, 13 de noviembre de 2014
EL AVESTRUZ Y EL DETERGENTE
Un niño que
caminaba con su madre cogido de la mano me señaló con el dedo. Un dedo
acusador, un dedo vergonzante, un dedo, un temible dedo y dijo:
—Mira mamá una
avestruz llorando.
—Marquitos no
seas impertinente. Perdone señor.
lunes, 10 de noviembre de 2014
ÚLTIMA OPORTUNIDAD
Llevaba su mejor
traje, un traje que se había hecho en el sastre de mi padre, color gris oscuro,
una camisa blanca muy almidonada y una corbata azul oscuro.
Les prometo que
intenté hablar pero no me salía, mi abuelo me miraba como a un bicho raro, él
me miraba a mí como un bicho raro, se acercó al carrito y se sirvió café en una
taza sucia, cogió una servilleta y empezó a desmaquillarse.
—Lo pintan a uno
como un payaso, ¿Quieres un café niño? —me miró de nuevo— Café, digo que si
quieres café.
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